La celebración del Carnaval
Casa 25 de diciembre celebramos Navidad, fiesta religiosa inamovible impuesta por el papa Liberio allá por el siglo IVº. Recordemos: “…al moverse la Pascua, se mueve la cuaresma, al moverse la cuaresma se mueve el carnaval…”, por consiguiente llegamos al tema de hoy.
Carnaval etimológicamente hablando es una palabra proviente del término italiano ‘carnevale’ y éste a su vez del latín ‘carnem levare’ cuyo significado literal es ‘quitar la carne’ (carnem: carne – levare: quitar).
Si bien antiguamente era una fiesta religiosa (había Misas de carnaval antes de la reforma del Concilio Vaticano II) hoy es conocida y reconocida como una fiesta o celebración social de algarabía en donde las diferentes poblaciones la celebran a su forma y manera.
Carnaval son solo los dos días previos al miércoles de ceniza, éste se mueve como se mueve el calendario lunisolar hebreo que marca el tiempo de las festividades judías; al cambiar cada año la fiesta pascual (a veces más en marzo otras más en abril) cambia también el periodo preparatorio de cuaresma (40 días) que se inicia con el miércoles de ceniza. Por consiguiente insisto: al moverse la Pascua, se mueve la cuaresma, al moverse la cuaresma se mueve el carnaval.
El carnaval no tiene nada que ver con el calor y los juegos de agua, por más que éstos sean frecuentes en el cono sur del mundo. Sí están ligados a expresiones de “sana rebeldía” social, en donde se deja aflorar pensamientos, acciones “picarescas” y expresiones singulares, por ejemplo gente vestida de diablitos, beodos, etc.
Durante la Edad Media se impuso como penitencia la abstención de comer carne, por eso era frecuente que quienes pudieran hicieran “valer” la carne en eso días previos, antes de que se la prohibieran; también se prohibía comer huevos los que reaparecían en los días posteriores al Domingo de Gloria (recordemos que las roscas tienen huevos como uno de sus símbolos culinarios de la vida).
Las celebraciones de carnaval fueron utilizadas muchas veces para “entretener” o “distraer” al puedo quien tenía dos días de olvido de sus ocupaciones y preocupaciones. En Argentina fueron permitidas y prohibidas sistemáticamente desde el Gobierno, habiéndose recuperado los feriados de lunes y martes de carnaval no hace muchos años. Estas fechas son parte de nuestro calendario de costumbres, costumbres que es bueno y sano conocer en sus orígenes, para así saber bien trasmitirlos.
Prof. Rubén Alberto Gavaldá y Castro
Presidente del Instituto CAECBA
@ProfesorGavalda
