CUANDO EL REGISTRO VEXILOLÓGICO NO TIENE NI TON NI SON
Realizar un Congreso Internacional, como lo fue el VIII Congreso Internacional de la Lengua Española realizado en Argentina en 2019, lleva mucho esfuerzo, dedicación y trabajo. La Comisión Organizadora tiene ardua labor tratando de contemplar desde el agua de los disertantes hasta la seguridad de los asistentes. No digo nada nuevo, pero quiero resaltarlo antes de comenzar el desarrollo en sí mismo de este pensamiento que versa sobre la forma y manera en que se colocaron el principal símbolo de las delegaciones participantes.
A la luz de la fotografía ilustrativa, ¿Qué podemos ver?
1. Que se optó por utilizar un sistema de ubicación de Banderas por derecha y alternancia comenzando por la anfitriona (Argentina) y partiendo del centro métrico. Este registro vexilológico es correcto cuando se utilizan pocas Banderas y todas de igual precedencia. Al ser más de 20 Pabellones presentes debió utilizarse la siguiente alternativa: ubicar en el inicio la Nacional (extremo derecho) y alineadas a su izquierda las restantes, pudiendo finalizar con otra Nacional como cierre. Aquí no se utilizó, quizás –pienso- para que justamente la Bandera Argentina se la reconozca en el medio del escenario y de ese modo en la fotografía quede a la derecha de quien dirige la palabra.
2. La ubicación de las demás Banderas debe ser hecha por la lengua vernácula, nunca mejor que en esta ocasión, pero las Banderas si observamos están emplazadas de cualquier manera, a modo de ejemplo Costa Rica está mucho después que México. Grosero error protocolar y diplomático. Ofende gratuitamente y eso no es ceremonial y mucho menos protocolo.
3. Hay Banderas “pour la galerie”: Estados Unidos de Norteamérica, Corea, etc. ¿Qué hacen allí? Sinceramente no lo sé. Las Banderas convocadas deben representar a las delegaciones presentes, y no a una persona de nacionalidad extranjera; insisto no son elementos decorativos, cansa ya repetirlo tantas veces.
4. Que sea un congreso de la lengua española con su cabeza de delegación coronada no le da preeminencia sobre los otros países. Y no tomo como válido que lo organiza el Instituto Cervantes y que así lo dispone, estas tierras ya no son hispanas. Ninguna institución supranacional tiene injerencia ni capacidad para intervenir y alterar el ceremonial y protocolo de una Nación soberana, en este caso Argentina.
Hay mucho que rever para optimizar. Las intenciones son buenas, pero no alcanzan. Si faltamos el respeto a un país por no respetar su Bandera estamos lejos del ceremonial y el protocolo. Ceremonial es orden y no caos, por mucho que este caos parezca ordenado.
Prof. Rubén Alberto Gavaldá y Castro
Presidente del Instituto CAECBA
@ProfesorGavalda
